AFP Y REUTERS
Caracas, 8 de septiembre. La Unión Nacional de Trabajadores (UNT), central obrera afín al gobierno del presidente Hugo Chávez, tomará 800 empresas que están paralizadas en Venezuela, entre ellas las trasnacionales Parmalat y Heinz, informó su coordinadora, Marcela Máspero.
''Ante los ataques del neoliberalismo y del capitalismo, nosotros utilizaremos los mecanismos de los trabajadores, y ahora acompañados por las comunidades vamos a ocupar esas empresas'', señaló Máspero, citada por el diario local El Universal.
La líder dijo que ya los trabajadores han tomado ocho empresas, incluidos los silos del grupo Polar y una planta procesadora de tomates de la compañía estadunidense Heinz.
Entre las instalaciones que han sido tomadas, algunas declaradas de utilidad pública y entregadas a cooperativas, y otras a petición de los empresarios endeudados, están dos de Parmalat, la de acero Sideroca, el frigorífico Fribarsa, la papelera Venepal y la textilera Inveval.
Parmalat rechazó las declaraciones de Máspero y precisó que las dos usinas que la UNT asegura están tomadas realmente están ''bajo administración extraordinaria del gobierno italiano, se encuentran operativas y están en la fase final de venta''.
Parmalat calificó de ''intimidatoria'' y fuera de la ''normativa legal'' las declaraciones de la dirigente sindical y aseguró que la venta de las dos instalaciones está prevista en el plan de restructuración de la empresa italiana desde su quiebra en 2004.
Máspero dijo que las ocupaciones que realice la central chavista contarán con protección de los militares, porque ''nosotros mismos no podemos hacernos cargo de la seguridad''. Afirmó que las tomas se decidirán primero y ''después se resuelve el asunto de la propiedad, pues siempre hay razón para la ocupación''.
Según la constitución venezolana, el Estado puede intervenir empresas declaradas de ''interés social'' por la Asamblea Nacional, después de que los tribunales definan sentencias o indemnizaciones.
Este año el gobierno ha intervenido dos empresas privadas: una industria de tubos y una procesadora de papeles que cerraron durante y después de un paro petrolero entre 2002 y 2003, que fueron declaradas de utilidad pública y entregadas a cooperativas de trabajadores.
La multinacional Heinz dijo que espera una explicación sobre la intervención de su tomatera, al sostener que esa usina estaba ''en receso'' porque los campesinos proveedores de tomates habían incumplido con sus obligaciones.