MISIÓN CUMPLIDA
Por: Francisco Solórzano (Frasso)
Los hombres no deciden donde nacen, pero si donde luchan. No podemos escoger a nuestras familias, pero si nuestras compañías. No tenemos la posibilidad de seleccionar nuestro color de piel, pero si definir nuestros compromisos y asumirlos a cabalidad, sin condiciones.
En nuestro caso hemos asumido el compromiso del combate social desde que despertó nuestra conciencia política, en el umbral de la adolescencia. Desde entonces hemos mantenido el mismo rumbo y el mismo discurso de reivindicación a los humildes de la Tierra.
Durante todos estos años los escenarios han cambiado, pero no nuestra determinación. Detrás del lente de cámara fotográfica o desde el curul de la Asamblea Nacional o como el concejal mas joven de Venezuela, siempre hemos defendido con la misma pasión, los mismos principios.
Así asumimos desde un comienzo nuestra responsabilidad con el pueblo de Anzoátegui, cuando nos eligió como uno de sus representantes en la Asamblea Nacional. A ese pueblo le rendimos cuentas cada año, como consideramos esta obligado a hacer todo funcionario público, más aún si es un revolucionario.
Durante estos años hemos sido testigos privilegiados de los profundos cambios que se desarrollan en nuestra patria Bolivariana y hemos tenido el inmenso honor de librar heroicas batallas de la mano del pueblo, que ha sido el gran vencedor de paros y conspiraciones.
Tenemos la extraordinaria fortuna de vivir estos tiempos de Revolución en un país que vuelve a ser ejemplo para el mundo y digno heredero no solo de sus Libertadores, sino de sus habitantes originales, quienes lucharon sin tregua por su derecho a vivir en libertad y bajo sus propias reglas.
Por eso me siento enormemente satisfecho con la labor cumplida en la Asamblea Nacional, donde me toco enfrentar tiempos difíciles, pero también tiempos de gloria. No nací con una etiqueta que diga “Diputado de la República” y no pretendo hacerme de una banda irrompible ahora.
No niego que estoy convencido de tener los méritos para continuar mi trabajo desde el parlamento y que me hubiera gustado que el pueblo fuera el juez de mi desempeño. Pero mi verdadero compromiso es con la transformación de mi país y con el proceso revolucionario que lidera nuestro Presidente Hugo Chávez Frías. Eso es lo que verdaderamente importa.
Mi compromiso sigue intacto y es hasta siempre.
Para cualquier comentario: fsolorzano@asambleanacional.gov.ve
