Probablemente hayas escuchado hablar sobre las enfermedades psicosomáticas. Si no es así o si simplemente quieres saber un poco más al respecto en VivirSalud hablaremos de ellas. En primer lugar aclaremos que las enfermedades psicosomáticas se producen cuando un proceso psíquico tiene influencia en lo somático. Es decir, son aquellas enfermedades que tienen un origen psicologico.
Muchas veces sucede que las emociones y sentimientos negativos que no podemos exteriorizar se manifiestan en nuestro organismo a través de ciertos síntomas. En la medida que las emociones o el estrés sean más intensos mayores serán las respuestas de nuestro cuerpo.
La medicina intenta tomar cada vez más al individuo como un todo y entiende que la mente y el cuerpo no son elementos separados sin que funcionan como una unidad. Por ejemplo, una persona que ha sido depresiva durante largo tiempo verá debilitado su sistema inmunológico. Por lo tanto, su cuerpo será más vulnerable a ciertas afecciones.
El estrés, por otra parte, aumenta los niveles de colesterol, la hipertensión y hasta puede llegar a causar infartos y hemorragias cerebrales. En el aparato digestivo las enfermedades psicosomáticas se manifiestan a través de la gastritis, úlceras, diarreas y colon irritable.
Nuestra piel tampoco está libre de este fenómeno. Ni tampoco nuestro aparato respiratorio que puede sufrir tos, ataques de asma o bronquitis. A nivel muscular pueden aparecer las contracturas cervicales y los dolores lumbares. Ciertos problemas psicológicos también pueden producir disfunciones sexuales y alteraciones en la menstruación.
Para encontrar el origen del conflicto que lleva a las enfermedades psicosomáticas es necesario realizar una terapia psicológica. Así se logrará que los síntomas físicos desaparezcan y aumentará el bienestar total del individuo.
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