El nacimiento de un bebé es sinónimo de alegría pero también de nerviosismo al pensar si lo podremos atender correctamente. Es por esto que debemos conocer qué es normal y qué no en un recién nacido, para acudir rápidamente a nuestro pediatra de ser necesario, así como no ir de urgencia cuando no lo amerite.
En VivirSalud te presentamos lo que es normal en un recién nacido, lo que generalmente dista mucho de la imagen que nos hemos hecho viendo películas.
- Color: El color normal de un recién nacido varía de rosa a violáceo. Muchas veces el bebé presenta una ictericia fisiológica (color amarillento de piel y mucosas) desde el segundo día de vida, debido a su inmadurez para convertir la hemoglobina en bilirrubina y eliminarla. Generalmente este color amarillento va disminuyendo en los días siguientes.
- Piel: La piel, habitualmente, se ve rojiza, debido a la circulación inestable que poseen los recién nacidos. Además pueden tener las manos, pies y labios azulados, sobre todo al estar en un ambiente frío. Es frecuente que se presenten rasguños y moretones en diversas zonas del cuerpo, así como deformaciones de la cabeza debidos a los traumatismos sufridos en el parto.
- Abdomen: Generalmente el abdomen está abultado y redondeado, puede haber una hernia umbilical (un segmento de intestino queda bajo la piel por una pequeña abertura de la pared muscular) que cierra sola, aproximadamente al año de vida.
- Patrón respiratorio: Es normal que los recién nacidos presenten un patrón respiratorio inestable, es decir, que su ritmo respiratorio y su frecuencia vayan cambiando, incluso pueden tener periodos cortos de apnea, lo que se debe a que la adaptación a la respiración extra uterina.
Teniendo en cuenta estas características de los recién nacidos y observando su comportamiento podremos estar tranquilos y esperar calmadamente el día del control con el pediatra.
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