El sofá favorito de Levi, un perro escocés que escogió el avejentado asiento como cama, fue salvado luego de que personas de todo el mundo firmaran una petición para convencer a su dueña de que no lo tire.
Jacky Jackson quería deshacerse del "oloroso y masticado" sofá, aprovechando que se mudaba de casa.
Sin embargo su pareja Darren Spence lanzó una petición online en busca de apoyo para conservar el desgastado mueble, favorito del can.
Jackson aceptó conservar la cama de Levi si suficiente gente apoyaba la moción.
Más de 1000 personas respondieron al llamado, obligando a la pobre dueña a ceder y llevar el viejo sofá en su nuevo hogar.
"Levi se está amoldando a su nueva casa y ya se ha estacionado nuevamente sobre su sofá favorito", reportó Spence a la BBC el lunes. "Está feliz, que es lo principal".
La noticia alegrará a las decenas de personas que escribieron desde Alemania, Finlandia y diversas partes del Reino Unido para salvar el mueble, que tiene seis años -y varias mordidas-.
Menos feliz está sin embargo la dueña de Levi, que describió el sofá como "un desastre".
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