domingo, agosto 23, 2009

Cien años sobre una caminadora



Todos admiramos a las personas que sobrepasan los noventa años en buenas condiciones. La vida a esta edad no es nada fácil, y la mayoría de las personas no logra alcanzarla, y entre los que lo consiguen, muchos lo hacen en muy malas condiciones físicas que prácticamente les causan más angustias que dicha.

No obstante, algunas personas lo consiguen en condiciones óptimas. Hace poco hablamos del fallecimiento del hombre más viejo del mundo, quien no parecía estar nada mal en cuanto a su salud, y hoy hablamos de un caso, si bien no idéntico, similar.

Se trata de la estadounidense Ida Wasserman, quien festejó su cumpleaños número 100 sobre una cinta caminadora de gimnasio.

Efectivamente, así como lo leen. Parece un poco increíble (aunque no menos admirable) que una persona tenga la voluntad y el estado físico aún a esa edad para continuar concurriendo al gimnasio a menudo a ejercitarse y tomárselo como un placer y no como una exigencia.

Leámoslo de la misma Ida, quien dice lo siguiente: “Recomiendo mantenerse siempre activo, porque cuando uno deja de estarlo, deja de ser –en parte- una persona”.

Y creo que tiene toda la razón. La falta de actividad a toda edad es algo que sedentariza y hace mucho daño. Ejemplos como este son verdaderas joyas a las que hay que observar con profunda admiración y respeto. ¡Sigamos su ejemplo!


No hay comentarios.: