La ansiedad es una emoción básica de los seres humanos, es muy común y esta presente a lo largo de toda la vida. Es una reacción emocional ante situaciones amenazantes o peligrosas y de alguna manera es una forma de defensa frente a las adversidades. El problema de la ansiedad es cuando se sobrepasan los límites normales de ansiedad.
En estos casos es importante saber cómo controlar la ansiedad, puede resultar en una patología psicológica grave si no bajamos los niveles de ansiedad a los valores normales. Lo primero que hay que hacer es evitar que la ansiedad siga creciendo, para esto es necesario producir un cambio en el estilo de vida.
El ejercicio físico puede ayudar y mucho, no solamente se logra un beneficio físico y mental directamente de la práctica de ejercicio físico sino que se puede tomar como un momento para encontrarse a uno mismo y hacer algo que se disfruta, tomarse un tiempo para uno mismo.
Hay que intentar evitar a toda costa cargarse de responsabilidades y obligaciones, decidir a conciencia qué cosas hay que hacer y que otras cosas podemos dejar para otro momento. No intentar hacer todo lo que se presenta al mismo tiempo ayudará a tener tiempo para relajarse y ocuparse de uno mismo. Es importante fijarse objetivos realistas, que sean posibles.
Algunos ejercicios de relajación pueden ayudar mucho a controlar la ansiedad. Uno de ellos se hace de la siguiente manera:
Primero que nada se debe encontrar una posición lo más cómoda posible, puede ser en un sillón o acostado. El ejercicio consiste en tensar los músculos durante 10 segundos y luego relajar los músculos durante 15 segundos. Sólo una vez . Se debe prestar atención especialmente a la diferencia entre tener los músculos tensos y relajados. Se hace lo mismo con todos los grupos musculares de a uno por vez.
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