La palabra infarto automáticamente la vinculo con la idea de una mala sorpresa. Pero, al parecer mi idea de que si es infarto te toma por sorpresa no es correcta. Un infarto se puede conocer, prevenir y detectar. El infarto cerebral ocurre cuando una arteria del cerebro se obstruye o se rompe, dejando de suministrar riego sanguíneo a las células del cerebro, que dejan de recibir oxígeno y mueren.
Para poder reconocer un infarto cerebral es necesario conocer los síntomas, algunos de éstos son: adormecimiento en la cara, en los labios, y problemas para hablar. El dolor de cabeza, los mareos o la pérdida de conciencia también nos están diciendo algo.
Para prevenir un infarto cerebral se tiene que controlar la presión arterial, la presión alta es un síntoma de mala circulación sanguínea que puede provocar un infarto. Mantener una buena alimentación también es una forma de prevenir un infarto, ésta debe ser balanceada, baja en sal y se deben evitar las grasas saturadas. Fumar o tomar alcohol… totalmente prohibido.
Hacer ejercicio obviamente que ayuda, evitando que se fije el colesterol en las arterias. Un buen consejo a seguir es realizarse un análisis de sangre anualmente, más aún si en nuestra familia alguien sufrió un infarto cerebral.
Lo principal es estar atento a los síntomas y llevar un estilo de vida saludable de modo de reducir las posibilidades de que un infarto cerebral nos sorprenda.
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