Qué es el bruxismo y cómo se controla

Hace un tiempo solía levantarme a menudo con un leve sensación de presión en las mandíbulas. Como se me calmaba solo, a los pocos minutos, nunca le di mucha importancia hasta que mi dentista me dijo que notaba incipientes signos de desgaste en mis dientes... Pues bien, tenía bruxismo y nunca me había dado cuenta porque esta condición ocurre mientras dormimos.

¿Qué es el bruxismo?

El bruxismo es el hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes cuando estamos durmiendo, aunque también puede presentarse durante el día. Se trata de una condición bastante común, que puede ser leve y no exigir tratamiento en algunos, pero grave, doloroso y con peores consecuencias para otros. Es que, cuando el bruxismo no es tratado, se pueden presentar trastornos en la mandíbula, dolores en el rostro y de cabeza y roturas en los dientes.

Síntomas

Estos son algunos de los síntomas del bruxismo. Si los presentas, es aconsejable que visites un odontólogo para comenzar un tratamiento.

• Dientes desgastados, astillados o rotos
• Desgaste del esmalte dental
• Aumento de la sensibilidad dental
• Dolor o rigidez en la mandíbula
• Dolor de oído (debido a las contracciones musculares)
• Dolor de cabeza
• Dolor facial
• Muescas en la lengua
• Daños en el interior de las mejillas

Junto con estos síntomas, hay otra señal que puede indicarte que estás sufriendo de bruxismo y es que tu pareja, o personas que duermen en tu misma habitación, sientan que haces un “chirrido” con la boca mientras duermes.

Causas

Se cree que las principales causas del bruxismo son psicológicas. El acto de rechinar o apretar los dientes es una reacción inconsciente para liberar tensiones acumuladas debido al estrés o la ansiedad. También puede ser síntoma de una rabia contenida, o una personalidad agresiva, hiperactiva o competitiva.

Por otro lado, el bruxismo puede ser provocado por causas físicas como una mala alineación de los dientes superiores e inferiores, problemas de sueño, respuesta a un dolor de oído o dentición (especialmente en niños), como complicaciones de enfermedades como el Parkinson o como efecto secuendario de ciertos medicamentos psiquiátricos.

Tratamiento del bruxismo

En primera instancia debemos consultar con un odontólogo para analizar el caso. Como en muchos casos no somos conscientes de que tenemos bruxismo hasta que aparecen complicaciones, es fundamental visitar un profesional que chequee signos o síntomas, y nos de la atención necesaria.

Si efectivamente tu dentista diagnostica que estás sufriendo este problema, te recomendará un protector o placa bucal que debes utilizar entre los dientes mientras duermes. Esta placa evitará los movimientos maxilares que causan el desgaste dental.

El tratamiento del bruxismo también debe atacar sus causas de fondo, que comúnmente son el acumulamiento de estrés, ansiedad y nervios. Si logras controlarlos, seguramente en consecuencia disminuirá el riesgo de bruxar durante la noche, o incluso, durante el día.

¡Relájate!

En VivirSalud te hemos enseñado muchísimos consejos para combatir el estrés. Algunos de ellos son hacer ejercicio diariamente -para liberar endorfinas y promover un estado saludable y de bienestar en el organismo-, practicar yoga o meditación, tomar un baño caliente, recibir masajes, escuchar música relajante, acostumbrarnos a respirar profundamente... Todos estos pequeños hábitos te ayudarán muchísimo.

Evita estimulantes a la noche

Evita tomar té, café y/o alcohol luego de la cena y antes de irte a dormir. Tampoco fumes. Estas sustancias estimulantes incrementan nuestro estado de alerta y ansiedad, lo que puede agravar el bruxismo cuando estamos durmiendo.

Habla con tu pareja

Si vives con tu pareja, o compartes la habitación con alguien, pregúntales si escuchan algún tipo de ruido o chirrido proveniente de tu boca durante la noche. Si lo nota, quiere decir que en ese momento estás bruxando.

Visita tu odontólogo regularmente

Acudir al dentista con frecuencia es importante, pues nadie mejor que este profesional para detectarnos los signos de bruxismo en la boca y las mandíbulas, y para recomendarnos soluciones específicas según nuestro caso. Si tienes una leve sospecha de bruxismo, visítalo para quitarte tus dudas antes que sea demasiado tarde.

Recuerda que el estrés también perjudica nuestra salud bucal. ¡Elimínalo de tu vida! También te recomendamos que conozcas otras condiciones que pueden dañar tus dientes.