Los problemas relativos al ácido úrico son bastante comunes en la población. Se considera que cuando se tiene una relación de 7 mililitros de ácido úrico en un decilitro de sangre, el nivel de ácido úrico en el flujo sanguíneo es alto, lo cual puede conllevar importantes problemas.
Entre ellos está la artritis crónica, por ejemplo, que nace a partir de la depositación en nuestras articulaciones de las sales que el ácido úrico va generando en nuestra sangre, lo cual, a medida que pasa el tiempo, puede llegar a desencadenar esta enfermedad. Otra enfermedad frecuente causada por el ácido úrico es la llamada Enfermedad de la Gota, que se caracteriza por un dolor agudo en el dedo gordo del pie, y que va subiendo progresivamente por toda la extremidad.
Un factor causal de grandes niveles de ácido úrico en la sangre son las llamadas Purinas, compuestos químicos que contienen nuestras células y algunos alimentos como las hortalizas o las leguminosas por ejemplo.
Por supuesto que alimentos como las carnes rojas y blancas, extractos de carnes, vísceras y algunos granos poseen elevados niveles de purinas, y en una dieta que enfatice en la reducción de los niveles de ácido úrico son los primeros alimentos que deben evitarse. Sin embargo, quiero destacar a las legumbres y hortalizas como alimentos aportadores de purinas, que, en tanto tales, contribuyen a subir los niveles de ácido úrico en la sangre.
Posteriormente, cuando los niveles de ácido úrico vuelvan a descender, las legumbres y hortalizas pueden volver a ser incorporadas paulatinamente a la dieta hasta nivelar el nivel de ácido úrico en la sangre.
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