Es difícil encontrar alguna bebida o alimento con tantos beneficios para la salud como el té verde. La cultura china sabe de los beneficios medicinales del té verde desde tiempos inmemoriales, usándolo para todo, desde el dolor de cabeza hasta la depresión. En su libro Té Verde: El secreto natural para una vida más saludable, Nadine Taylor afirma que el té verde ha sido usado en China como elemento medicinal por al menos 4000 años.
Actualmente los científicos, tanto de Oriente como de Occidente, han encontrado evidencia que respalda las propiedades del té verde que han sido utilizadas durante tanto tiempo. Por ejemplo, en 1994 la revista del Instituto Cancerológico Nacional de Estados Unidos publicó los resultados de un estudio epidemiológico, declarando que el té verde redujo el riesgo de sufrir cáncer de esófago en hombres y mujeres chinos, en un porcentaje cercano al 60%.
Investigadores de la Universidad de Purdue, concluyeron recientemente que el té verde inhibe el crecimiento de las células cancerígenas. También existen estudios indicando que beber té verde disminuye los niveles totales de colesterol, a la vez que mejora la tasa de colesterol “bueno” (HDL). Algunos de los problemas de salud en los que se sugiere el té verde es benéfico son:
- Cáncer
- Artritis reumatoidea
- Niveles altos de colesterol
- Problemas cardiovasculares
- Infecciones
- Función inmunológica debilitada
El secreto del té verde se debe a que es rico en polifenoles del tipo catequina, en particular epigalocatequina galata o EGCG. La EGCG es un poderoso antioxidante, que además de inhibir el crecimiento de las células cancerígenas, mata las células malignas sin dañar el tejido sano.
Aunque el sabor del té verde puede resultar fuerte para muchos el esfuerzo de probarlo y consumirlo se verá recompensado. Además de los anteriores beneficios del té verde se ha descubierto que mata la bacteria responsable de la formación de la placa dental, por lo que beneficiará incluso a la salud oral.
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