
La anorexia es un trastorno alimenticio y psicológico común entre las mujeres, sobre todo en plena adolescencia y juventud. En una sociedad en la que predomina un modelo de belleza que apunta a tener el cuerpo perfecto y en la que todo parece guiarse a través de la imagen, lamentablemente muchas chicas no se sienten conformes con su cuerpo y recurren a medidas extremas, como dejar de comer, para adelgazar y así “encajar” en ese ideal preestablecido.
Cuando hablamos de anorexia inmediatamente la asociamos a la figura femenina, pero… ¿qué sucede con los hombres? ¿Son inmunes a este trastorno? Si bien son pocos casos en comparación con las mujeres, los hombres también sienten la presión social de tener un físico privilegiado y pueden ser víctimas de la anorexia.
¿Cuál es la gran diferencia entre la anorexia femenina y la anorexia masculina?
En primer lugar, la anorexia en los hombres es mucho más difícil de diagnosticar porque implica un comportamiento distinto. A diferencia de las chicas anoréxicas, que son capaces de pasar días enteros sin comer ni un trocito de pan, los hombres que sufren esta enfermedad tienden a exigirse demasiado en el gimnasio. En otras palabras, mientras una mujer anoréxica se nota a simple vista por su extrema y repentina delgadez, un hombre anoréxico puede seguir viéndose sano y fuerte cuando en realidad no lo está.
Y si a ello le sumamos que los hombres son más reacios a pedir ayuda, pues sería un signo de debilidad, la situación de la anorexia masculina puede tornarse mucho más compleja y difícil de combatir.
Estos son algunos síntomas de la anorexia masculina:
Pérdida de peso
Necesidad de hacer ejercicio todo el tiempo
Obsesión por el estado físico
Miedo a engordar
Pérdida de apetito
Cansacio, fatiga
Vómitos y uso de laxantes o pastillas para adelgazar
Cambios de humor repentinos
Comportamiento perfeccionista
Si tienes algún amigo que presenta estas características no dudes en ofrecerle tu ayuda y consultar urgente con un profesional.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario