Los científicos han descubierto por qué algunas personas simplemente no pueden resistir la comida.
Usaron escáners para demostrar que los "centros de recompensa" en los cerebros de algunas personas son particularmente sensibles a los avisos publicitarios con comida y al empaquetado de los alimentos.
Es probable que una mayor estimulación de esta área, a través de imágenes de comida, lleve al excesico consumo de alimentos y a la obesidad.
El estudio, publicado en la revista Neuroscience, fue realizado por la Unidad de Ciencias Cognitivas y Cerebrales del Consejo de Investigaciones Médicas del Reino Unido.
Los investigadores le mostraron a un grupo de personas imágenes de alimentos apetitosos (como torta de chocolate), comidas no tan amadas (como brócoli) y alimentos asquerosos (como carne podrida).
Al mismo tiempo, midieron la actividad cerebral de los voluntarios a través de un escáner.
Tras la prueba, los participantes debieron completar un cuestionario para evaluar su deseo general por obtener metas u objetivos codiciados.
Los resultados mostraron que las respuestas de los voluntarios a este cuestionario predecían cuánto se activarían los centros de recompensa de su cerebro con las imágenes de los alimentos ricos.
No es falta de voluntad
"Los nuevos hallazgos muestran que, incluso en individuos saludables, los centros de recompensa cerebrales de algunas personas son más sensibles a las señales de alimentos apetecibles", afirmó el Dr. John Beaver, quien condujo el estudio.
"Esto ayuda a explicar por qué algunos individuos son más vulnerables a desarrollar ciertos desórdenes, como los trastornos alimentarios compulsivos", agregó.
Según el Dr. Beaver, los resultados también podrían ayudar a comprender la vulnerabilidad de algunos a múltiples formas de adicción y comportamientos compulsivos.
El estudio también podría aliviar a aquellos que constantemente tratan de comer menos, pero fallan.
"Esta investigación demuestra que no sólo se trata de una falta de voluntad o de gula", señala el Dr. Ian Campbell, experto en obesidad de la organización caritativa Weight Concern.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario