Las proteínas presentes en la carne, el pescado, los huevos y los lácteos, son de alto valor biológico o de buena calidad, mientras que las que contienen los frutos secos, los cereales y las legumbres (a excepción de la soja), no alcanzan la calidad ni el valor biológico de las anteriores.
¿Qué son las proteínas de buena calidad?
El cuerpo humano necesita diariamente una cantidad determinada de proteínas de calidad para poder llevar a cabo funciones tan básicas como el crecimiento o la formación y regeneración de las células Las unidades básicas que componen las proteínas son los aminoácidos.
Las proteínas humanas están formadas por la combinación de 22 aminoácidos. De estos 22, 8 son esenciales, lo que quiere decir que el organismo no puede formarlos y que por tanto se deben aportar diariamente a través de los alimentos.
En función de la presencia de estos aminoácidos esenciales, las proteínas pueden clasificarse como de alto o de bajo valor biológico, o lo que es lo mismo, como proteínas de buena o de mala calidad.
Cuando en una proteína falta un aminoácido esencial, su calidad disminuye ya que el cuerpo no es capaz de formar proteínas si falta tan solo uno de los aminoácidos esenciales.
Las proteínas de origen animal y las de la soja contienen todos los aminoácidos esenciales, por lo que son de buena calidad, mientras que las que poseen los cereales, las legumbres o los frutos secos, son deficitarias en algún aminoácido esencial, motivo por el que se las considera incompletas o de bajo valor biológico.
Combinar con acierto los alimentos vegetales
Las legumbres y los frutos secos son deficitarios en el aminoácido esencial llamado metionina, mientras que los cereales lo son en el aminoácido esencial conocido como lisina. Por tanto, si se combinan legumbres con cereales o frutos secos con cereales, se obtienen todos los aminoácidos esenciales, ya que el que falta en un alimento está presente en el otro y viceversa.
De este modo se pueden obtener proteínas de buena calidad mediante la combinación adecuada de alimentos de origen vegetal.
Algunos de los platos que se pueden elaborar combinando estos alimentos son garbanzos con piñones, lentejas con arroz, ensalada de arroz con pistachos, garbanzos con arroz y verduras salteadas, o ensalada de soja y sésamo, entre otros, ya que la variedad de platos vegetales con proteínas de calidad puede ser tan amplia como permita la imaginación y las ganas de probar platos nuevos.
Fuente:
Cortesía de-Nlm.nih.gov
No hay comentarios.:
Publicar un comentario