La leche cruda (sin ningún procesamiento) es muy rica, sobretodo si viene calentita recién sacada de la vaca, pero ese acto campestre puede tener grandes repercusiones para nuestra salud. El consumo de leche cruda en cualquiera de sus formas (leche, queso fresco, etc.) puede transmitirnos enfermedades que nos dejarán como portadores para el resto de nuestras vidas.
En VivirSalud te contamos cuáles son estas enfermedades y comprenderás que esta práctica constituye un gran riesgo para la salud, que es preferible evitar.
La venta de leche cruda y productos derivados ha sido prohibida en la mayoría de los países, por lo que se vende pasteurizada o, al menos, procesada por algún tratamiento térmico. Esto se debe a que muchas enfermedades pueden ser transmitidas de esta forma, de las cuales la mayoría son causadas por bacterias que contaminan la leche, o por enfermedades que estaban en las vacas lecheras.
Dentro de los gérmenes causantes de patologías a los que nos exponemos al beber leche cruda encontramos a Escherichia coli, Listeria, Salmonella, Yersinia y Campylobacter. Estas bacterias producen alteraciones gastrointestinales en las personas, generando intoxicaciones al actuar a través de toxinas, que se presentan con síntomas como diarrea, dolor estomacal, fiebre, dolor de cabeza, vómitos y debilidad. Este cuadro también suele ocurrir cuando se consumen alimentos en mal estado o que no fueron correctamente refrigerados, lo que lo vemos en las noticias frecuentemente cuando las personas asisten a un banquete y terminan en el hospital. No solo por las comidas puede ocurrir esto, sino que por beber leche cruda también.
Otras patologías bacterianas que se pueden adquirir a través de la leche son la tuberculosis y la brucelosis, ambas enfermedades zoonóticas (contagiadas desde los animales), las cuales no se pueden eliminar una vez que nos infectamos.
-La tuberculosis generalmente afecta al sistema respiratorio, generando tos con flemas, que puede agravar dependiendo de la inmunidad de la persona, pero también puede quedarse en los huesos, produciendo alteraciones en ellos.
-La brucelosis produce síntomas como los de la gripe, dolor articular y alteraciones musculo-esqueléticas que vuelven a producirse en el tiempo.
La clave para prevenir estas enfermedades es consumir leche y sus productos derivados pasteurizados, con lo que podremos tomar tranquilamente un vaso de leche sin tener que lamentarnos después.
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